Te explicamos qué es el desarrollo sustentable, cuáles son sus características principales y sus tres pilares fundamentales: lo ambiental, lo social y lo económico.
¿Qué es el desarrollo sustentable?
El desarrollo sustentable es un modelo de crecimiento económico que busca satisfacer las necesidades del presente sin comprometer los recursos del futuro. Se centra en lograr un equilibrio entre el desarrollo económico, la equidad social y la preservación del ambiente. Este enfoque promueve un desarrollo que sea sostenible a largo plazo.
Para esto, el desarrollo sustentable promueve actividades económicas que reduzcan los niveles de contaminación y mitiguen los daños, que utilicen responsablemente los recursos y eviten la degradación ecológica, y que también impulsen políticas de inclusión social, de igualdad de género y el respeto de los derechos humanos.
El término “desarrollo sustentable” ganó notoriedad a nivel internacional con la publicación del informe “Nuestro futuro común” en 1987, también conocido como el Informe Brundtland. Este informe fue elaborado por la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de las Naciones Unidas, presidida por la primera ministra noruega Gro Harlem Brundtland.
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Características del desarrollo sustentable
El desarrollo sustentable presenta las siguientes características:
- Busca satisfacer las necesidades del presente con el menor impacto ambiental posible.
- Se basa en tres pilares: la sustentabilidad ambiental, social y económica.
- Promueve actividades económicas no contaminantes y el uso de energías renovables.
- Busca proteger la biodiversidad y los ecosistemas.
- Se propone reducir la utilización de elementos químicos nocivos para la salud y de contaminantes tóxicos.
- Promueve una distribución más equitativa de la riqueza.
- Busca favorecer prácticas productivas con inclusión social.
Los tres pilares del desarrollo sustentable
El desarrollo sustentable ha emergido en los últimos años como un paradigma en la búsqueda de un futuro que armonice el progreso actual con las necesidades de las generaciones futuras. En un mundo caracterizado por la interconexión de sistemas económicos, sociales y ambientales, este enfoque integral busca proporcionar soluciones que vayan más allá de la satisfacción inmediata de las demandas actuales.
El desarrollo sustentable no se basa solamente en la sustentabilidad económica, sino que tiene en cuenta también la sustentabilidad ambiental y social.
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La sustentabilidad ambiental
La sustentabilidad ambiental se centra en el manejo responsable de los recursos naturales y la conservación del ambiente. Los aspectos que más se destacan son:
- La preservación de la biodiversidad y los ecosistemas.
- La promoción de la eficiencia energética y el uso de energías renovables para reducir la dependencia de fuentes no renovables como el petróleo y el carbón.
- El fomento de prácticas agrícolas que reduzcan la utilización de químicos y compuestos tóxicos en los cultivos.
- La implementación de prácticas de gestión sostenible de residuos domiciliarios e industriales.
- La mitigación del cambio climático mediante la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
- El impulso de prácticas industriales que reduzcan la contaminación del agua, del aire y de los suelos.
La sustentabilidad social
La sustentabilidad social se enfoca en promover la equidad y la justicia social como componentes esenciales del desarrollo sostenible. Busca garantizar la igualdad de oportunidades y derechos para todos los miembros de la sociedad, y promueve modelos de desarrollo que puedan contribuir a combatir problemáticas como la pobreza, la exclusión social y la falta de acceso a servicios básicos.
Además, incluye la promoción de la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, la erradicación de la discriminación de género y la creación de entornos que permitan el pleno desarrollo y la participación de todas las personas.
La sustentabilidad económica
La sustentabilidad económica promueve un desarrollo que sea eficiente, viable a largo plazo y equitativo en la distribución de la riqueza. Incluye la adopción de modelos económicos que maximicen el uso eficiente de los recursos, minimicen los desperdicios y la generación de residuos y fomenten la innovación tecnológica.
Asimismo, busca garantizar la equidad social al distribuir los beneficios del desarrollo de manera justa y promover la igualdad de oportunidades y derechos para todas las personas. La sustentabilidad económica se centra así en un crecimiento sostenible que no comprometa la capacidad de las generaciones futuras para alcanzar sus propias metas.
Para ello, busca promover actividades que sean exitosas económicamente y que generen rentabilidad y ganancias, pero que, al mismo tiempo, sean sustentables ecológicamente y produzcan el menor impacto ambiental posible.
El rol de las empresas en el desarrollo sustentable
Las empresas deben favorecer el fomento del desarrollo sustentable a partir de impulsar prácticas sostenibles en sus modelos de negocios. Su objetivo principal debe ser gestionar de manera responsable los recursos naturales, adoptar tecnologías limpias y reducir al máximo el impacto ambiental de sus operaciones.
Además, tienen la responsabilidad de fomentar la innovación en la creación de productos y servicios que minimicen impactos negativos y contribuyan a la transición hacia una economía más amigable con el ambiente. Las empresas también pueden establecer metas de reducción de emisiones de gases contaminantes e implementar prácticas de responsabilidad social empresarial que incluyan contrataciones con salarios justos e inclusión laboral.
El rol del Estado en el desarrollo sustentable
El Estado debe establecer un marco legal y normativo que regule y promueva prácticas empresariales sostenibles. Su responsabilidad incluye la formulación de políticas públicas que incentiven la conservación del ambiente, la gestión sostenible de los recursos y la mitigación de los impactos ambientales por parte de las empresas.
Además, debe supervisar y hacer cumplir las normativas ambientales, e imponer sanciones a aquellos que no respeten los estándares establecidos. Asimismo, el Estado tiene la responsabilidad de promover la investigación y el desarrollo de tecnologías limpias, la educación ambiental, y la participación en foros y cumbres intergubernamentales para mitigar las problemáticas ambientales de escala global.
El rol de la ciudadanía en el desarrollo sustentable
Los ciudadanos pueden contribuir al desarrollo sustentable al abogar por políticas ambientales que garanticen el derecho a un ambiente sano. Además, como consumidores, tienen la responsabilidad de modificar sus prácticas de consumo y producción de residuos para reducir al máximo los desechos generados.
La ciudadanía puede también involucrarse en iniciativas comunitarias, proyectos de conservación y programas de educación ambiental que contribuyan a mejorar las condiciones ambientales de su entorno.
Los principales desafíos del desarrollo sustentable
Los principales desafíos que enfrenta la comunidad internacional respecto del desarrollo sustentable son:
- El cambio climático. Es la principal amenaza global a la que se enfrenta el planeta en la actualidad. La mitigación y adaptación al cambio climático constituye el desafío más importante que tiene la comunidad internacional para garantizar el desarrollo sostenible.
- Las desigualdades socioeconómicas. La brecha entre ricos y pobres, tanto a nivel nacional como global, representa una gran problemática mundial. La inequidad en el acceso a recursos, servicios básicos, oportunidades de empleo y educación dificulta el desarrollo sustentable y equitativo.
- La escasez de agua. La gestión sustentable del agua potable es un problema muy extendido a nivel global, ya que muchas regiones enfrentan escasez de agua y carecen de sistemas adecuados de saneamiento. Garantizar el acceso al agua limpia es esencial para la salud y el desarrollo humano.
- La pérdida de biodiversidad. La pérdida acelerada de biodiversidad amenaza la estabilidad de los ecosistemas y la seguridad alimentaria. La conservación de la biodiversidad es primordial para mantener la salud de los ecosistemas, de modo que es fundamental promover un desarrollo que no los deteriore aún más.
- La contaminación. La contaminación del aire, del agua y del suelo representa una amenaza para la salud humana y el ambiente. La gestión y reducción de la contaminación por parte de las empresas y el Estado son fundamentales para lograr un desarrollo sustentable con el menor impacto ambiental posible.
Los objetivos del desarrollo sostenible
En 2015, la Organización de las Naciones Unidas estableció la agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Esta agenda promueve un plan de acción a quince años para alcanzar una serie de 17 objetivos que permitirán impulsar el desarrollo sustentable a nivel mundial:
- Fin de la pobreza: poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.
- Hambre cero: poner fin al hambre.
- Salud y bienestar: garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.
- Educación de calidad: garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
- Igualdad de género: lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas.
- Agua limpia y saneamiento: garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.
- Energía asequible y no contaminante: garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna.
- Trabajo decente y crecimiento económico: promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible, el empleo y el trabajo decente para todos.
- Industria, innovación e infraestructura: construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación.
- Reducción de las desigualdades: reducir la desigualdad en y entre los países.
- Ciudades y comunidades sostenibles: lograr que las ciudades sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles.
- Producción y consumo responsables: garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.
- Acción por el clima: adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
- Vida submarina: conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos.
- Vida de ecosistemas terrestres: gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad.
- Paz, justicia e instituciones sólidas: promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas.
- Alianzas para lograr los objetivos: revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible.
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Referencias
- Goni, R. y Goin, F. (2006). Marco conceptual para la definición de desarrollo sustentable. Salud Colectiva, 2(2). http://www.scielo.org.ar/
- Organización de Naciones Unidas. (s.f.). Objetivos de desarrollo sostenible. https://www.un.org/
- Universidad Autónoma de Nuevo León. (s.f.). ¿Qué es el desarrollo sustentable? https://sds.uanl.mx/
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