Cuerpo humano

Te explicamos todo sobre el cuerpo humano, cómo está compuesto y sus características. Además, los sistemas que presenta y etapas vitales.

¿Qué es el cuerpo humano?

El cuerpo humano es la presencia física, material, de un ser humano. Se le considera, desde el punto de vista filosófico tradicional, como uno de los dos aspectos que lo constituyen a éste en su totalidad, junto con la mente o el espíritu.

Desde un punto de vista biológico, el cuerpo humano reúne las características de un organismo eucariota, pluricelular, del reino animal, perteneciente a la clase de los mamíferos y al de los primates, único integrante del género Homo (los demás están extintos).

La constitución del cuerpo humano es el resultado de un proceso evolutivo de casi 2 millones de años de largo, a partir de algún pariente común entre el chimpancé (Pan troglodytes) y el hombre.

Numerosas especies de homínidos surgieron a medida que el proto ser humano configuraba su cuerpo para caminar erguido, oponer sus pulgares y desarrollar su cerebro, dando como resultado nuestra especie Homo sapiens con el cuerpo que ya conocemos, hace 200.000 años aproximadamente.

Composición atómica del cuerpo humano

El cuerpo humano está compuesto en su mayoría por agua (H2O) que se halla en el interior de las células, en la sangre y bañando todos los tejidos. Se estima que un 65% del cuerpo humano adulto sea agua.

Como el de todo ser viviente conocido, el cuerpo humano es orgánico y está constituido atómicamente por complejísimas estructuras moleculares a partir de, fundamentalmente, átomos de hidrógeno (60%), oxígeno (25,5%), carbono (10,5%), nitrógeno (2,4%), calcio (0,22%), fósforo (0,13%), azufre (0,13%), potasio (0,04%), cloro (0,03%) entre otros.

En su mayoría, estos elementos conforman en nuestro cuerpo sustancias orgánicas como los carbohidratos, lípidos y proteínas.

Características generales del cuerpo humano

El cuerpo humano tiene una altura media de 1,7 m (adulto) y una densidad promedio de 933 kg/m3. Su peso oscila en promedio entre los 50 y los 90 kg.

La superficie del cuerpo está cubierta por unos 2 m2 de piel con un espesor variable entre los 0,5 y los 4mm.

Composición celular del cuerpo humano

El cuerpo humano está constituido por casi cien billones de células eucariotas (con núcleo definido), organizadas en tejidos y éstos en órganos. Las células humanas presentan altísimo grado de especialización, pudiendo clasificarse en:

• Células nerviosas. Encargadas de la conducción de los estímulos eléctricos del cuerpo.
• Células musculares. Que constituyen los músculos que permiten la locomoción.
• Células óseas. En los huesos que componen el esqueleto y le dan estructura y soporte al organismo.
• Células adiposas. Que integran los tejidos grasos de depósito energético y estructura.
• Células sanguíneas. Glóbulos rojos para transportar el oxígeno en sangre, glóblos blancos para defender el organismo, entre otros tipos celulares.
• Células reproductivas. Óvulos o espermatozoides, llamados células sexuales, con fines reproductivos.
• Células parenquimales. Constituyen el tejido sin órganos que brinda densidad al organismo, llamado “parénquima”. 

Anatomía del cuerpo humano

A primera vista, el cuerpo humano está integrado por tres grandes segmentos:

• Cabeza. En donde están los órganos sensores, la boca y el núcleo nervioso que controla todo el organismo, el cerebro.
• Tronco. En donde se hallan todos los órganos internos. Centro del cuerpo.
• Extremidades. Los distintos miembros articulados que permiten la locomoción (piernas) y el manejo de herramientas (brazos), unidos al tronco.

El cuerpo humano presenta simetría bilateral, esto es, que está organizado de modo tal que puede trazarse un eje vertical que lo divida en dos y ambas mitades serán semejantes.

Sistemas del cuerpo humano

El funcionamiento de los diversos órganos del cuerpo humano se clasifica en circuitos llamados sistemas. Los siguientes son los principales:

• Sistema circulatorio. Lo integran el corazón y la vasta red de venas, arterias y capilares, que permiten la llegada de la sangre a los distintos sectores del cuerpo que la necesitan.
• Sistema cardiorespiratorio. Sistema que comprende la nariz, tráquea, bronquios, pulmones y el corazón, y los conductos que los conectan a estos últimos, permitiendo el ingreso de aire al organismo para extraerle el oxígeno necesario e incorporarlo a la sangre.
• Sistema nervioso. Compuesto por el cerebro, la médula espinal y la red de terminaciones nerviosas que permiten controlar el cuerpo y percibir sensaciones.
• Sistema digestivo. Comprende la boca, el esófago, el estómago y los intestinos, y cumple con la función de la alimentación: ingerir, disolver y digerir los nutrientes de la comida.
• Sistema excretor. Se ocupa de eliminar las sustancias líquidas o sólidas residuales de la digestión y del funcionamiento propio del organismo. Involucra los riñones, la vejiga, el conducto urinario.

Esqueleto humano

El cuerpo humano se sostiene y protege con más de 200 huesos, que son estructuras orgánicas calcificadas y mineralizadas para ganar resistencia a los impactos y al propio peso del cuerpo.

Estos huesos componen el esqueleto, una estructura común y continua que abarca todos los sectores del cuerpo excepto el abdomen, y que opera por dentro del cuerpo (endoesqueleto) a diferencia del caparazón de otras especies (exoesqueleto).

El esqueleto además cumple funciones importantes en la segregación de células sanguíneas o hematopoyesis.

Microbioma humano

Dentro del cuerpo humano, y en especial en el intestino, habitan numerosos microbios (sobre todo bacterias) que resultan inocuas para el organismo y a menudo contribuyen con diversas funciones de descomposición de la materia orgánica.

Se estima que en cada centímetro cuadrado de piel humana haya unas 10.000 bacterias, y en total en nuestro cuerpo albergamos unos 100 billones, que suponen el 1 al 3% de nuestra masa corporal.

Diferenciación sexual

El cuerpo humano presenta variación sexual corporal desde el instante del nacimiento, ya que los individuos nacen con órganos sexuales definidos: pene y testículos en el hombre y vulva y ovarios en la mujer.

Esta diferenciación se acentúa luego de la adolescencia, cuando el despertar sexual ocurre de mano de las hormonas y tienen lugar los rasgos de maduración sexual que distinguen al hombre adulto de la mujer adulta, tales como vello facial, erección y eyaculación, vello corporal y ensanchamiento de la voz en el hombre y surgimiento de los pechos, agrandamiento de la cadera, menstruación en las mujeres.

Puede servirte: Características físicas del hombre y la mujer.

Obtención de energía del cuerpo

Como todos los animales, el cuerpo humano opera en base a la obtención de energía mediante la oxidación de glucosas, para lo cual requiere tanto de la respiración para adquirir el oxígeno como del consumo de materia orgánica para extraer los azúcares.

Esta energía es la que sostiene el organismo andando, y en ausencia de alimentos, el cuerpo humano procederá a extraer la materia orgánica de sí mismo (de los tejidos grasos primero, luego de los musculares). Cuando no pueda ya hacerlo más, cesará de funcionar.

Etapas vitales del cuerpo humano

El cuerpo humano en su recorrido vital atravesará, normalmente, las siguientes etapas desde el nacimiento a la muerte:

• Infancia. Etapa de indefensión que prosigue al nacimiento y durante la cual el amamantamiento es la única fuente de alimento. Los huesos de la cabeza se fusionan y el cuerpo se prepara para empezar a crecer.
• Niñez. Etapa en que el ser humano aprende a comunicarse, a caminar por cuenta propia y a retener esfínteres. El cuerpo inicia su desarrollo y crecimiento, acumulando la energía necesaria para etapas posteriores.
• Adolescencia. La etapa de tránsito hacia la adultez, caracterizada por cambios hormonales intensos que conllevan cambios físicos, emocionales y conductuales. Se desarrollan las diferencias sexuales.
• Adultez. Etapa plena de desarrollo y de madurez sexual.
• Vejez. Etapa de debilitamiento de las funciones corporales debido a la fatiga y al prolongado funcionamiento. El cuerpo abandona paulatinamente sus necesidades reproductivas y preserva su energía para mantenerse.