Centralismo y federalismo

Te explicamos qué son el centralismo y el federalismo y sus diferencias. Además, cuáles son sus ventajas, sus desventajas y algunos ejemplos.

¿Qué son el centralismo y el federalismo?

El centralismo y el federalismo son dos modelos de organización política y administrativa. El centralismo tiende a concentrar el poder político en un gobierno central único, mientras que el federalismo propone distribuirlo en distintas entidades autónomas y asociadas que conforman una federación.

El centralismo suele caracterizar a los Estados unitarios, en los que el gobierno central toma la mayoría de las decisiones políticas y ejerce su autoridad sobre las dependencias administrativas regionales y locales. El federalismo es característico de los Estados federales, que agrupan a varios estados o provincias autónomos, con sus propios gobiernos y constituciones, pero unidos en una entidad mayor administrada por un gobierno federal. El centralismo y el federalismo son también las doctrinas que defienden quienes proponen la conveniencia de uno u otro sistema.

Ambos modelos tienen sus ventajas y desventajas, y sus seguidores y detractores. A lo largo del siglo XIX, sobre todo en las jóvenes naciones latinoamericanas, los defensores de uno y otro modelo se enfrentaron en el campo político (como la sucesión de proyectos federales y centralistas en México) e incluso protagonizaron conflictos armados (como las luchas entre unitarios y federales en las Provincias Unidas del Río de la Plata). La elección entre uno y otro modelo influyó en el modo en que se organizaron de allí en adelante los Estados y en sus destinos económicos, sociales y políticos.

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Tipos de centralismo

Existen distintos tipos de centralismo:

• Centralismo puro o concentrado. Es la forma de organización estatal en la que todo el poder reside en un órgano de gobierno central. Es característica de los modelos más puros de Estado centralista o unitario.
• Centralismo desconcentrado. Es una forma de organización estatal en la que el gobierno central delega en alguna medida el poder sobre determinadas áreas en entidades regionales o locales.
  • Con descentralización administrativa. Es un modelo de Estado centralizado que delega ciertas labores administrativas en las dependencias provinciales pero conserva la concentración del poder político en el gobierno central.
  • Con descentralización política y administrativa. Es un modelo que puede darse en Estados unitarios o federales, y que consiste en el predominio del gobierno central sobre las provincias pero con cierto margen de autonomía para la representación política provincial.

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Tipos de federalismo

Existen distintos tipos de federalismo. De acuerdo a la forma de Estado, puede ser:

• Federación. Se trata de un Estado federal compuesto por la asociación de distintas provincias o estados descentralizados, que tienen un orden jurídico propio pero reconocen la autoridad de un gobierno común y una Constitución federal, y no pueden abandonar voluntariamente la federación.
• Confederación. Se trata de un conjunto de estados soberanos e independientes unidos por un tratado, que toman decisiones comunes pero conservan su plena autonomía, por lo que pueden anular dichos acuerdos y separarse de la confederación, ya que no están obligados por una Constitución federal común.

Por otro lado, el federalismo puede ser simétrico o asimétrico:

• Federalismo simétrico. Es la situación en la que cada provincia o estado tiene los mismos poderes y responsabilidades que los demás.
• Federalismo asimétrico. Es la situación en la que las distintas provincias o estados asumen poderes y responsabilidades diferentes, conforme a su propia constitución o a su nivel de preponderancia en la nación.

Diferencias entre centralismo y federalismo

Las principales diferencias entre centralismo y federalismo son:

• Orden jurídico y constitucional. El centralismo consiste en un ordenamiento jurídico único basado en una sola Constitución nacional. En cambio, el federalismo dispone de un ordenamiento jurídico doble, en el que cada provincia o estado tiene su propia constitución, aunque esta se subordina a una Constitución federal que engloba a toda la nación.
• Administración burocrática. En un Estado centralista o unitario, las decisiones políticas y los procedimientos administrativos se basan en una jerarquía única en cuya cúspide se encuentra la autoridad central, que gobierna el país desde una ciudad. En un Estado federal, existe una burocracia descentralizada que permite a cada estado o provincia administrar sus asuntos locales de un modo más o menos independiente.
• Presupuesto. En un modelo centralista, el gobierno central gestiona los impuestos y concentra y redistribuye los recursos económicos de toda la nación. En un modelo federal, las autoridades provinciales gestionan de manera independiente el presupuesto provincial y participan en las decisiones que conciernen a la distribución de recursos entre el gobierno central y las provincias o estados.

Ventajas y desventajas del centralismo

Algunas ventajas del centralismo son:

• La concentración del poder político en una autoridad central puede promover la cohesión y unidad nacional.
• La formación de gobiernos nacionales fuertes puede contribuir a mantener la estabilidad política frente a conflictos regionales o luchas separatistas.
• La inexistencia de instancias de decisión provincial autónomas puede hacer más ágiles y directos los procedimientos administrativos.
• La concentración de los recursos económicos permite gestionarlos y distribuirlos de acuerdo con una mirada más general de las necesidades de cada región y de la nación.

Algunas desventajas del centralismo son:

• Puede promover políticas que desconocen las realidades de las provincias y no satisfacen sus necesidades e intereses.
• Puede generar tensiones con los poderes provinciales y derivar en gobiernos centrales autoritarios que refuerzan su poder para poder imponer sus decisiones.
• Las comunidades locales y regionales pueden ver disminuida su representación política al no contar con gobiernos provinciales autónomos.
• La centralización administrativa puede generar un sistema burocrático demasiado grande y lento.
• La concentración y distribución centralizada de los recursos puede satisfacer las necesidades del gobierno central pero generar desigualdades económicas regionales.

Ventajas y desventajas del federalismo

Algunas de las ventajas del federalismo son:

• Permite constituir sociedades más democráticas al depender de la conciliación y los acuerdos permanentes entre el gobierno central y las autoridades de las provincias o estados.
• Implica una mayor participación ciudadana de las comunidades de las provincias en la defensa de sus intereses y favorece la toma de decisiones más atentas a las necesidades regionales.
• Tiende a respetar la diversidad y las particularidades sociales y culturales de las distintas provincias, lo que suele ser considerado particularmente importante en los países multiétnicos o Estados plurinacionales.
• La autonomía provincial puede servir de contrapeso al poder central y evitar ciertas tendencias autoritarias.
• La responsabilidad de las autoridades provinciales en algunas áreas políticas y administrativas puede aliviar la carga del gobierno central y su burocracia.

Algunas desventajas del federalismo son:

• La autonomía provincial puede dar lugar a conflictos de intereses entre el gobierno central y las provincias, o incluso entre las provincias, o llevar a cierta falta de cohesión o coordinación de las políticas nacionales.
• Puede promover desacuerdos en la distribución de los recursos y consolidar las disparidades regionales en la medida en que cada provincia cuente con diferentes posibilidades y especializaciones económicas y el gobierno central esté limitado legalmente para intervenir.
• La superposición de autoridades puede promover disputas sobre las competencias políticas, generar grietas legales entre el ordenamiento jurídico nacional y las jurisdicciones de las provincias.
• Se puede volver más complicado o costoso el funcionamiento administrativo al duplicar las instancias burocráticas y requerir mayores controles para la implementación de políticas de alcance nacional.

Ejemplos de centralismo y federalismo

Existen numerosos ejemplos contemporáneos de centralismo y federalismo. El centralismo es característico de algunos Estados unitarios, ya sea que tengan un modelo de centralismo puro o que cuenten con cierto grado de descentralización política o administrativa, como Francia, Portugal, Paraguay, Chile, el Reino Unido y España.

El federalismo está presente en diversos países cuyas provincias o estados soberanos albergan estructuras políticas, parlamentarias y judiciales propias e integran el Estado nacional, como Estados Unidos, México, Argentina, Venezuela, Alemania y Brasil.

Guerras entre centralistas y federales

Los conflictos entre defensores del centralismo y del federalismo tuvieron lugar principalmente en el siglo XIX, especialmente en América Latina, donde distintas facciones de las repúblicas que acababan de independizarse de España se enfrentaron por imponer su propio modelo de organización del Estado.

• En las Provincias Unidas del Río de la Plata (futura República Argentina), se enfrentaron durante la década de 1820 los unitarios y los federales, que entre 1828 y 1831 libraron una guerra en la que vencieron los federales. Esto llevó a la conformación de la Confederación Argentina (1831-1861), cuya Constitución fue sancionada en 1853.
• En México, se promulgó una Constitución federal en 1824, interrumpida por un régimen centralista en 1835 y restaurada en 1846, en medio de conflictos entre ambas facciones. En 1857 se promulgó una nueva Constitución federal, que inicialmente tuvo dificultades para ser aplicada debido a los conflictos entre liberales y conservadores (como la Guerra de Reforma de 1858 a 1861) y a la breve existencia del Imperio de Maximiliano (1864-1867).
• En Venezuela, la Guerra Federal enfrentó entre 1859 y 1863 a conservadores (centralistas) y liberales (federalistas). Terminó con un tratado de paz que confirmó la victoria liberal, instaló en el gobierno a los liberales y llevó a la promulgación de una Constitución federal en 1864.

En el caso de España, durante la breve experiencia de la Primera República española (1873-1874) se sucedieron proyectos federalistas y unitarios, y mientras gobernaban los federalistas hubo incluso un movimiento intransigente llamado cantonalismo que defendía una forma de republicanismo federal construido desde abajo.

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Referencias

• Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
• Galán Lorda, M. (2022). La construcción de Estados: centralismo, federalismo, independentismo y foralismo. Ediciones Universidad de Navarra.
• Heslop, D. A. (2023). Political system. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/
• The Editors of Encyclopaedia Britannica. (2024). Federalism. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/