Te explicamos qué era el Hombre de Cromañón, cómo era su modo de vida y alimentación. Además, sus características generales.
¿Qué era el Hombre de Cromañón?
Se conoce como “Hombre de Cromañón” u “Hombre de Cromagnon” a una población de Homo sapiens que habitó Europa durante el Período paleolítico Superior (hace 40.000 a 10.000 años). Homo sapiens es el nombre científico de la especie humana y la utilización del término hace referencia a la evolución del ser humano.
El término “Hombre de Cromañón” actualmente está en desuso ya que pertenece a una tradición académica que postulaba la evolución de las razas humanas a partir de diferentes especies de homínidos. Hoy en día, para referir a estas poblaciones se habla simplemente de Homo sapiens moderno u Homo sapiens europeo.
La población de Homo sapiens antes conocida como “Hombre de Cromañón” habitó diferentes regiones de Europa y desarrolló distintas culturas durante el Paleolítico Superior.
En términos generales, se destaca el auge de la fabricación de herramientas en marfil, asta y hueso, la especialización en la manufactura de objetos líticos afilados (proyectiles) y la invención de las agujas para coser. Por otro lado, la creación de adornos personales, estatuillas, pinturas figurativas y el grabado de símbolos sugieren un salto en la calidad del proceso de simbolización.
Durante aproximadamente 10.000 años, el Homo sapiens moderno coexistió con el Homo neanderthalensis, especie distinta dentro de la familia de homínidos que fueron parte del género humano. Los Homo neanderthalensis se extinguieron hace 30.000 años con el fin de la última glaciación.
Ver además: Hombre primitivo
Uso del término "Hombre de Cromañón"
Durante mucho tiempo se supuso que el “Hombre de Cromañón” era el representante prehistórico de la raza blanca (o caucasoide). Se lo consideraba uno de los tres tipos primitivos de la humanidad, junto al Hombre de Grimaldi (raza negra o negroide) y al Hombre de Chancelade (raza amarilla o mongoloide).
Sin embargo, esta teoría ha sido abandonada por historiadores y paleontólogos porque no existen evidencias científicas que permitan avalar la constitución de razas humanas a partir de diferentes subespecies de Homo sapiens. Actualmente, el término “Hombre de Cromañón” ya no se utiliza y se habla, en cambio, de Homo sapiens europeo u Homo sapiens moderno.
Origen del Homo sapiens
El Homo sapiens es una especie que evolucionó del Homo erectus. Su origen (como especie claramente separada) data de hace 200.000 años. Se llama Homo sapiens arcaico a la especie que vivió esta transición.
La mayoría de los investigadores sostienen que la especie de Homo sapiens sapiens (el ser humano actual) evolucionó en África y se trasladó hacia el resto de los continentes, donde se coexistió con otras poblaciones de Homo sapiens arcaico.
Europa comenzó a estar poblada por Homo sapiens modernos desde hace 43.000 años aproximadamente. Durante un tiempo, se llamó a las poblaciones europeas de Homo sapiens, con el nombre de “Hombre de Cromañón”. Sin embargo, se debe destacar que la diferenciación respecto a otras poblaciones de Homo sapiens es solo cultural y no corresponde a distinciones de tipo biológico.
Origen del término "Hombre de Cromañón"
En 1869, el paleontólogo francés Louis Lartet encontró restos fósiles de Homo sapiens moderno en la cueva de Cromagnon, cerca de Les Elyzies de Tayac-Sireuil, Dordogne.
El conjunto de restos fósiles consistía de tres ejemplares adultos masculinos, uno femenino y un feto, y constituía el primer hallazgo de restos fósiles de Homo sapiens en territorio europeo. En ese entonces, se categorizó el hallazgo como “Hombre de Cromagnon” (“Cromañón” es la castellanización del término).
Modo de vida del Homo sapiens europeo
Las poblaciones de Homo sapiens moderno que habitaron Europa durante el Paleolítico Superior tenían una vida caracterizada por:
- Nomadismo. Los grupos humanos no se asentaron en un lugar de manera permanente, sino que se trasladaron siguiendo los ciclos estacionales y las migraciones de animales. Crearon campamentos móviles y utilizaron cuevas naturales como refugio.
- Economía de subsistencia. Los Homo sapiens se alimentaban de elementos que existían en la naturaleza a través de la caza y la recolección. Durante el Paleolítico Superior, desarrollaron técnicas de caza grupales más complejas, con armas que les permitieron cazar animales grandes.
- Bandas. La forma de vida nómade y la economía de subsistencia llevó a que los grupos humanos se organizaran en grupos pequeños (llamados “bandas”) de entre 20 y 30 personas. Estos grupos estaban unidos por relaciones de parentesco y controlaban los territorios por los que se desplazaban para obtener sus recursos.
- Sociedades igualitarias. Los hombres primitivos no tenían líderes o jefes permanentes. A veces, un individuo podía destacarse por sus habilidades y era especialmente respetado. Se cree que las personas más grandes del grupo eran escuchadas por su experiencia y tenían mayor autoridad para resolver conflictos. Sin embargo, eran sociedades igualitarias en las que no había jerarquías de poder establecidas.
Ver también: Pueblos nómades y sedentarios
Alimentación del Homo sapiens en el Paleolítico Superior
Los restos fósiles y materiales del Homo sapiens europeo revelan que cazaban bueyes, mamuts y renos, lo que permite suponer que la carne era una parte importante de su dieta. Además, esta actividad les proveía de pieles para fabricar abrigos.
La recolección compensaba el resto de su dieta con productos vegetales como frutas, hojas y semillas.
Cultura del Homo sapiens en Europa
Las principales características de la cultura de las poblaciones de Homo sapiens europeos fueron las siguientes:
- Cultura lítica y ósea. Los Homo sapiens europeos del Paleolítico Superior desarrollaron diferentes técnicas de trabajo en la piedra (gravetiense, solutrense y magdaleniense). A lo largo del periodo, el estilo de trabajo lítico se fue volviendo más homogéneo entre las diferentes áreas europeas y las láminas de piedra fueron progresivamente más largas y pequeñas. Las principales herramientas que se hacían con piedra eran raspadores, buriles, láminas de dorso rebajado y puntas de lanza. En cambio, se utilizaban los huesos de diferentes animales para hacer bastones, agujas, espátulas y arpones.
- Representación simbólica. Los Homo sapiens del Paleolítico Superior se caracterizaron por el desarrollo de su pensamiento simbólico y diferentes formas de representación. Si bien otras especies de homínidos presentaron rasgos de pensamiento simbólico (por ejemplo, los Homo neanderthalensis también enterraban a sus muertos), se cree que el Homo sapiens se diferenció por el nivel de complejidad con el que desplegó su potencial intelectual a través del pensamiento simbólico. En Europa, los Homo sapiens expresaron sus ideas a través de representaciones de pintura rupestre y el tallado de esculturas antropomórficas. Los especialistas consideran que estas representaciones pueden implicar la existencia de rituales y, por lo tanto, creencias complejas sobre su existencia y el funcionamiento del mundo. Los principales restos de arte rupestre en Europa se encuentran en la Cueva de Altamira, la Cueva de Chauvet y la Cueva de Lascaux.
Cromañones y neandertales
Los Homo sapiens modernos coexistieron con los Homo neanderthalensis en Europa durante aproximadamente 10.000 años. Los especialistas han postulado diferentes hipótesis sobre la naturaleza de las relaciones entre las poblaciones de ambas especies.
Aunque el tema sigue en debate, los estudios genéticos sobre el proceso de hominización indican que existe evidencia de hibridación entre las especies. Esto significa que los contactos entre ambas especies fueron biológicos, además de culturales.
Por otro lado, la mayoría de los especialistas consideran que la extinción de los Homo neanderthalensis se dio como consecuencia de los cambios climáticos del fin de la última glaciación y de la superioridad cultural que poseían los Homo sapiens modernos para adaptarse a las nuevas condiciones.
Historia cultural del Homo sapiens sapiens en Europa
- Cultura auriñaciense (40.000-30.000 años atrás). Los restos fósiles pertenecientes al Homo sapiens moderno más antiguos encontrados en Europa se encuentran en Rumania, en las cuevas de Peştera cu Oase, Peştera Muierii y Peştera Cioclovina. Entre ellos, los restos más antiguos fueron datados en alrededor de 40.500 años. Sin embargo, en el yacimiento ruso de Kostenki se han encontrado vestigios materiales que podrían identificarse como pertenecientes a poblaciones de Homo sapiens, y que datan de 3.000 o 4.000 años más antiguos. Se trata de producciones de piedra que, por su técnica de producción, pertenecen a la industria lítica del Paleolítico Superior. Sin embargo, existen debates sobre si pertenecen a una población de Homo sapiens o a una población neandertal.
- Cultura gravetiense (30.000-20.000 años atrás). Hace unos 30.000 años comenzó en el hemisferio norte la fase más fría de la última glaciación. La mayor parte de las tierras europeas se convirtieron en estepas y atravesaron importantes cambios ecológicos debido al descenso de la temperatura promedio. Durante ese período se extinguieron los Homo neanderthalensis y a los territorios europeos llegaron nuevas oleadas de migraciones de Homo sapiens, provenientes de Asia, que trajeron un nuevo tipo de cultura, plenamente adaptada a la vida en las estepas. Esta cultura es conocida entre los especialistas como cultura gravetiense. De este periodo se destaca la invención de las agujas perforadas para coser y de armas basadas en la propulsión (lanzas o proyectiles) y la realización de estatuillas femeninas, actualmente conocidas como “venus paleolíticas”.
- Cultura solutrense (20.000-15.000 años atrás). Durante este periodo las poblaciones de Europa Occidental desarrollaron una cultura lítica caracterizada por la evolución de las técnicas de talla y retoque. Además, se destaca el arte rupestre en el que se representan pinturas zoomorfas en Roc de Sers y Fourneau-de-Diable, en Francia.
- Cultura magdaleniense (15.000-8000 años atrás). Este es el periodo final del Paleolítico Superior, y se caracterizó por el fin de la glaciación y los cambios climáticos que permitieron la generación de nuevos ecosistemas. Hubo un aumento en la cantidad de recursos naturales disponibles para la supervivencia. Esto permitió, a su vez, la aparición de los primeros asentamientos semipermanentes. Esta cultura se caracterizó por la expansión de técnicas de trabajo en piedra por todo el continente, la explotación de recursos marinos (con el uso de arpones) y la caza del caballo (en Europa occidental) y el mamut (en Europa oriental).
Sigue con: Neolítico
Referencias
- Martínez, I., & Sala, N. (2015). La aventura del Homo sapiens. Dendra médica. Revista de humanidades, 14(1), 65-79.
- Harris, M. (1981). Introducción a la antropología general. Alianza.
- “Hombre de Cromañón” en Wikipedia.
- “Así era la cara del hombre de cromañón” en La Vanguardia.
- “Historia de la humanidad 02 El Hombre de Cromañón” (video) en HistoriaTv.
- “El hombre de Cro-magnon” en Historia y Biografías.
- “Cro-Magnon 1” en Smithsonian National Museum of Natural History.
- “Cro-Magnon” en The Encyclopaedia Britannica.
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