Agua potable

Te explicamos qué es el agua potable y cuáles son sus características principales. Además, cómo se realiza el proceso de potabilización y los beneficios para la salud.

Agua potable - manantial
El consumo de agua potable es fundamental para la salud humana.

¿Qué es el agua potable?

El agua potable es aquella que no contiene microorganismos o sustancias químicas que puedan causar daño a la salud, según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS). De este modo, es segura para beber, para cocinar y para la higiene personal, sin riesgo de contraer enfermedades. 

El agua es un recurso cada vez más escaso y son muchas las poblaciones en el mundo que aún permanecen sin acceso a una fuente de agua segura: se estima que alrededor de 2.000 millones de personas carecen de acceso a servicios de agua potable. 

Instituciones como Unicef y la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideran la cuestión del acceso al agua potable como uno de sus objetivos prioritarios, ya que hay una relación directa entre el consumo de agua contaminada y una gran variedad de enfermedades derivadas. 

Ver además: Ciclo del agua

Características del agua potable

El agua potable se caracteriza por lo siguiente: 

  • Es fundamental para la salud humana. 
  • Se obtiene de fuentes naturales o a partir de un complejo proceso de potabilización. 
  • Es escasa a nivel mundial. 
  • Debe ser continuamente monitoreada para garantizar su calidad. 
  • Debe ser clara, inodora e insípida, y no debe contener sustancias químicas ni microorganismos que puedan afectar la salud. 

Proceso de potabilización del agua

El proceso de potabilización del agua se compone de distintas etapas: 

  • Captación. Esta etapa consiste en la recolección de agua desde fuentes naturales como ríos, lagos, embalses y acuíferos subterráneos. El agua recolectada es transportada hacia las plantas de tratamiento mediante sistemas de bombeo y conducción. 
  • Coagulación. En esta fase se añaden coagulantes químicos que facilitan la aglutinación de los sedimentos en partículas de mayor tamaño, denominadas flóculos, lo que favorece su decantación y filtración. 
  • Decantación. También conocida como sedimentación, es la fase en la que los flóculos formados durante la coagulación se dejan sedimentar. El agua floculada se transfiere a tanques de sedimentación donde, debido a la fuerza de gravedad, los flóculos más densos y pesados se depositan en el fondo. El agua clarificada, libre de la mayoría de las partículas suspendidas, se recoge en la parte superior de los tanques y se traslada a la siguiente etapa del proceso. 
  • Filtración. En esta etapa el agua clarificada pasa a través de filtros para remover las partículas restantes que no se sedimentaron durante la decantación. 
  • Cloración. En este proceso se añade cloro al agua para eliminar o inactivar microorganismos patógenos, como bacterias y virus que pueden causar enfermedades. El cloro también protege el agua de posibles contaminaciones durante su almacenamiento y distribución. 
  • Alcalinización. En este proceso se ajusta el pH del agua para hacerlo más cercano al neutro (pH 7), lo que es favorable para el consumo humano y la protección de la infraestructura del sistema de distribución. Este ajuste se realiza mediante la adición de sustancias alcalinas que neutralizan los ácidos presentes en el agua. 
  • Distribución. Finalmente, el agua tratada se almacena en tanques y se distribuye a los consumidores a través de una red de estaciones de bombeo y tuberías. 

Calidad del agua potable

Para ser agua potable tiene que cumplir con los estándares establecidos por la OMS.

El agua potable debe cumplir con estrictos estándares de calidad que garanticen que está libre de contaminantes y es segura para el consumo humano. Estos estándares son establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las autoridades sanitarias de cada país, y abarcan una amplia gama de parámetros físicos, químicos y microbiológicos.

Para que el agua sea considerada potable, debe ser clara, inodora e insípida, y no debe contener niveles perjudiciales de sustancias tóxicas ni microorganismos patógenos. 

Además, el agua potable debe estar libre de contaminantes, como metales pesados (plomo, mercurio, arsénico); compuestos orgánicos (pesticidas, herbicidas); elementos químicos industriales; bacterias, virus y parásitos; y sustancias como los nitratos y nitritos, ya que en altas concentraciones pueden ser especialmente peligrosos para la salud humana.

Acceso al agua potable

La OMS calcula que más de 2.000 millones de personas (el 25 % de la población mundial) no tiene acceso al agua potable. La escasez de este recurso puede plantearse desde dos puntos de vista: 

  • Escasez física. Es la que sucede cuando el agua es escasa por cuestiones climáticas y ambientales. Se da en las regiones con pocas precipitaciones, donde el acceso al agua potable está condicionado por la poca disponibilidad natural. 
  • Escasez económica. Es la que sucede en aquellos lugares donde el agua está disponible, pero las personas no pueden acceder a ella por la falta de infraestructura e inversión económica para extraerla y potabilizarla. 

Por estas razones, millones de personas en el mundo consumen agua no potable, lo que las expone a distintos tipos de enfermedades. 

Beneficios del agua potable

El agua potable es fundamental para mantener una hidratación adecuada del cuerpo, regular la temperatura, lubricar las articulaciones y transportar nutrientes y oxígeno a las células. 

La falta de acceso a agua potable conlleva graves riesgos para la salud. El consumo de agua contaminada puede conducir a la ingestión de patógenos, como bacterias, virus y parásitos, que causan enfermedades infecciosas graves. 

Entre las enfermedades más comunes asociadas con el consumo de agua contaminada, se encuentran el cólera, la disentería y la fiebre tifoidea. Estas enfermedades pueden provocar diarrea severa, deshidratación y, en casos extremos, la muerte.

Sigue con:

Referencias

¿Te interesan nuestros contenidos?

Sigue nuestra cuenta de Instagram, donde publicamos contenidos exclusivos.

¿Cómo citar este artículo?

Citar la fuente original de donde tomamos información sirve para dar crédito a los autores correspondientes y evitar incurrir en plagio. Además, permite a los lectores acceder a las fuentes originales utilizadas en un texto para verificar o ampliar información en caso de que lo necesiten.

Para citar de manera adecuada, recomendamos hacerlo según las normas APA, que es una forma estandarizada internacionalmente y utilizada por instituciones académicas y de investigación de primer nivel.

Sposob, Gustavo (24 de octubre de 2024). Agua potable. Enciclopedia Humanidades. Recuperado el 5 de noviembre de 2024 de https://humanidades.com/agua-potable/.

Sobre el autor

Autor: Gustavo Sposob

Profesor de Enseñanza Media y Superior en Geografía (UBA).

Fecha de actualización: 24 de octubre de 2024
Fecha de publicación: 8 de junio de 2016

¿Te fue útil esta información?

No

    ¡Genial! Muchas gracias por visitarnos :)