Te explicamos todo sobre el Medio Oriente, dónde se ubica y cómo es su geografía. Además, cuáles son sus características, economía y más.
¿Qué es el Medio Oriente?
Se conoce como Medio Oriente u Oriente Medio a la región geográfica que se encuentra ubicada en el noreste de África y el sudoeste de Asia. Se trata de un término sumamente utilizado, a pesar de que no hay un acuerdo estricto respecto a qué países comprende exactamente esta región.
Los parámetros de delimitación de Medio Oriente son geográficos, culturales, étnicos y religiosos, por eso hay diferencias en su delimitación y no existe una definición única en la que todos los autores coincidan. Sin embargo, suele haber acuerdo mayoritario en que los países que conforman esta región son Egipto, Irán, Turquía, Irak, Arabia Saudita, Yemen, Siria, Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Líbano, Palestina, Kuwait, Israel, Qatar y Baréin.
La denominación Medio Oriente comenzó a utilizarse en América y Europa a finales del siglo XIX y principios del XX. Antes, se utilizaba Lejano Oriente para referirse a los territorios de Asia más alejados de Europa (Japón, China, Corea) y Cercano Oriente para nombrar a los países asiáticos y africanos más próximos. Actualmente, muchos de esos países se consideran parte de Medio Oriente, lo que demuestra que los criterios de delimitación no están claramente establecidos.
- Ver además: Asia
Características de Medio Oriente
Algunas características de la región de Medio Oriente son:
- Se encuentran entre el noreste de África y sudoeste de Asia.
- Sus criterios de delimitación son variables.
- Ocupa casi 7 millones de kilómetros cuadrados.
- La población de los países que lo componen asciende a más de 430 millones de habitantes.
- El clima predominante es el árido cálido.
- Sus precipitaciones no superan los 300 mm al año.
- Sus principales actividades económicas son la producción de petróleo y gas natural, la agricultura, la minería y el turismo.
- El idioma predominante es el árabe.
- La religión mayoritaria es el islam.
- Son muy frecuentes los conflictos políticos, militares y territoriales.
Población y territorio de Medio Oriente
Si se toman en cuenta los países que habitualmente se reconocen dentro de Medio Oriente, la extensión territorial de esta región es de casi 7 millones de kilómetros cuadrados y la población supera los 430 millones de habitantes. Los países más poblados son Egipto, Irán y Turquía, que concentran casi el 40 % del total de la población.
Las cuestiones territoriales desencadenan desde hace décadas numerosos conflictos políticos y militares en esta región, entre ellos, el conflicto entre Palestina e Israel, que se enfrentan desde hace más de setenta años.
También son frecuentes las tensiones entre Irán e Irak, y fueron muy significativas las guerras en Irak (2003), en Siria (2011) y en Yemen (2015). La Organización de las Naciones Unidas ha intentado intervenir para solucionar las disputas de modo diplomático, pero, a pesar de eso, los conflictos armados continúan siendo frecuentes en Medio Oriente.
Clima y relieve de Medio Oriente
La mayor parte del territorio de los países que componen Medio Oriente tiene un clima árido cálido. Se caracteriza por tener elevadas temperaturas, con promedios por arriba de los 18 °C, y escasas precipitaciones, que no superan los 300 milímetros al año.
El relieve es variado: existen zonas montañosas, como la cordillera de Zagros en Irán; extensas mesetas, como la meseta de Anatolia en Turquía y la meseta arábiga; llanuras y valles, como el del río Nilo en Egipto y los de los ríos Tigris y Éufrates en Irak; y depresiones, como la del mar Muerto en el límite entre Israel y Jordania.
Los desiertos cálidos se extienden en gran parte de Medio Oriente. Uno de los más grandes es el desierto de Rub al-Jali, que ocupa sectores de Arabia Saudita, Yemen, Omán y Emiratos Árabes Unidos. Se trata de uno de los desiertos de arena más extensos del mundo, con más de 650.000 kilómetros cuadrados. A pesar de su gran superficie, es una región completamente deshabitada. En verano, sus temperaturas pueden superar los 55 °C, y las precipitaciones raramente alcanzan los 50 milímetros al año.
El subsuelo es rico en minerales y petróleo. Este último constituye la actividad principal de la mayoría de los países de Medio Oriente, y algunos de ellos, como Arabia Saudita, Irán, Irak, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos, forman parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Otros minerales abundantes en la región son el gas natural, el hierro, el fosfato, el cobre, el zinc y el oro.
Fauna y flora de Medio Oriente
La vida animal y vegetal de Medio Oriente está determinada por las condiciones climáticas extremas. Tanto los animales como las plantas que se encuentran allí cuentan con adaptaciones que les permiten sobrevivir al calor y la falta de agua.
Los cactus, las acacias y las palmeras son plantas que se pueden encontrar en Medio Oriente. Estas especies desarrollan profundas raíces que les permiten obtener agua del subsuelo, o tipos de hojas y tallos en los que almacenan agua. La palmera datilera es una planta característica de la zona, de donde se obtienen los dátiles típicos de la región.
En cuanto a la fauna, los camellos son animales característicos de Medio Oriente, puesto que su capacidad para almacenar agua y resistir altas temperaturas les permite adaptarse a las condiciones climáticas extremas de la región. Asimismo, han sido domesticados y se los utiliza como medio de transporte y de carga.
En las zonas un poco más húmedas, es posible la práctica de la agricultura y el pastoreo, actividades económicas muy importantes para millones de personas en la región.
Cultura y religión en Medio Oriente
Medio Oriente es considerado una de las cunas de la civilización humana, por lo que existen huellas vivientes o arqueológicas de sus culturas milenarias de capital importancia en la historia de la humanidad.
La región mesopotámica, por ejemplo, fue clave en el origen de las culturas antiguas que inventaron los cimientos de la civilización, como la escritura. Asimismo, la civilización persa, presente en Irán, es una cultura milenaria que se disputó con la Grecia helénica la supremacía del mundo en su época.
De Medio Oriente provienen también las tres grandes religiones monoteístas del mundo: el judaísmo, el cristianismo y el islam. En la ciudad de Jerusalem, en Israel, se encuentran sitios icónicos de cada una de estas religiones, separadas por muy poca distancia: la Mezquita de Omar, lugar sagrado para el islam; la tumba de Jesucristo, fundamental para la creencia católica, y el Muro de los Lamentos, sitio sagrado para la religión judía.
El islam es la religión predominante en Medio Oriente, con excepción del Estado de Israel, en el que la mayoría profesa la religión judía, y el árabe es el idioma mayoritario en casi todos los países, aunque también se habla persa, turco y hebreo.
Economía de Medio Oriente
La región de Medio Oriente es típicamente minera y petrolera, ya que en su subsuelo yacen alrededor del 60 % de los yacimientos de hidrocarburos del mundo, sobre todo de petróleo. Esto ha permitido el surgimiento de países sumamente ricos como Qatar, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita.
La minería también es importante en la región. En algunos países, la explotación y exportación de minerales aporta gran parte de sus ingresos. El fosfato, el hierro, el cobre y el oro son algunos de los minerales que más se encuentran.
En las zonas más húmedas, la agricultura es una actividad económica fundamental. Es el caso, por ejemplo, de Egipto, en donde se practica una agricultura intensiva en el valle del río Nilo, que es muy importante para la economía del país.
El turismo es otra actividad económica destacada para algunos de los países de Medio Oriente. Entre los sitios turísticos más visitados están la ciudad de Petra en Jordania, la ciudad de Jerusalem en Israel, las pirámides de Egipto y la ciudad de Dubái en Emiratos Árabes Unidos.
Política de Medio Oriente
Muchas naciones de Medio Oriente practican formas de monarquía para su organización política. Algunas son monarquías de tipo absolutista, como el caso de Arabia Saudita, y otras son monarquías constitucionales, como en Jordania, Kuwait y Baréin. Además, otros países utilizan la democracia como forma de organización política, tales como Israel y Kuwait.
La política internacional en la región es compleja, ya que ha sido escenario de abundantes conflictos, guerras e intervenciones extranjeras. Un ejemplo de ello es el llamado conflicto palestino-israelí, que tiene su origen luego de la Primera Guerra Mundial, tras la caída del Imperio Otomano, cuando Francia y Gran Bretaña colonizaron la región y favorecieron la inmigración judía en territorio palestino.
Otros ejemplos fueron la guerra del golfo Pérsico (1990-1991), una serie de conflictos armados entre Irak y Kuwait, este último apoyado por una coalición de países dirigida por Estados Unidos; y la guerra de Irak (2003-2011), en la que una nueva coalición de países liderada por Estados Unidos invadió el territorio con el propósito de deponer al por entonces presidente Saddam Hussein.
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Referencias
- Briceño V., G. (2020). Oriente Medio. Euston96. https://www.euston96.com/
- Martínez de la Garma, A. (2021). Construcciones conceptuales y geográficas de Medio Oriente y África y la influencia de Europa. Córdoba Global. Centro de Estudios Internacionales. https://cbaglobal.com.ar/
- Organización de las Naciones Unidas. (s. f.). Región del Medio Oriente y África del Norte. Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. https://www.ohchr.org/es/
- Organización de las Naciones Unidas. (2023). La guerra de Yemen. Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. https://eacnur.org/es/
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