Argumento deductivo

Te contamos qué es un argumento deductivo, sus características y ejemplos. Además, la diferencia con un argumento inductivo.

Argumento deductivo
Aristóteles dio el puntapié para que se usen los argumentos deductivos a través de los silogismos.

¿Qué es un argumento deductivo?

Un argumento o razonamiento deductivo es un tipo de razonamiento que pasa de lo general a lo particular. Se suele señalar que esta caracterización no es exhaustiva, ya que hay casos que la excede, pero se ajusta a la mayoría de ellos. Todos los razonamientos deductivos infieren de manera necesaria una conclusión a partir de una serie de premisas.

La validez de los argumentos deductivos está dada por su forma y por su carácter de verdad, que surge de una necesidad lógica. En un argumento deductivo, la verdad de las premisas implica la verdad de la conclusión. Es lógicamente imposible que se dé el caso en que las premisas sean verdaderas y la conclusión resulte falsa.

Así, la forma clásica de un argumento deductivo responde al siguiente ejemplo:

  • Premisa 1. Todos los hombres son mortales.
    Premisa 2. Sócrates es un hombre.
    Conclusión. Sócrates es mortal.

La primera premisa es una afirmación general. La segunda, una afirmación particular. Si se parte de la afirmación de que todos los hombres son mortales, y luego se toma un caso particular en el que se afirma que Sócrates es un hombre, necesariamente se debe deducir que Sócrates es mortal. Esto está garantizado por las normas de inferencia, que garantizan el cumplimiento de las leyes generales.

Aristóteles popularizó al argumento deductivo a través del silogismo, y gracias a su forma, el hecho de que garantice la validez del argumento y de que el argumento deductivo se deduzca de manera natural, el argumento o razonamiento deductivo es uno de los argumentos lógicos más empleados.

  • Ver además: Razonamiento inductivo

Aspectos lógicos del argumento deductivo

Un argumento deductivo es aquel en el que se obtienen conclusiones válidas, comprobables y comunicables, a partir de una o más premisas de tipo general.

Así, si se quiere obtener q a partir de p entonces q, podemos realizar la siguiente deducción:

  • p entonces q (premisa general)
    p (premisa particular)
    q (conclusión particular)

Los argumentos deductivos se caracterizan por:

  • Parten de una premisa general y van hacia lo particular. En este movimiento, realizan razonamientos descendentes (descienden de una generalidad a un caso concreto). Sus premisas anticipan la conclusión porque la contienen.
  • Su validez está dada por su forma.
  • Siempre se da el caso de que la verdad de las premisas garantiza la de la conclusión.
  • Se diferencian de los razonamientos inductivos, que realizan movimientos ascendentes.

Ejemplos de argumentos deductivos

  • Premisa 1: Los peces nadan.
    Premisa 2: El dorado es un pez.
    Conclusión: El dorado nada.
  • Premisa 1: Todos los hombres son mortales.
    Premisa 2: Mauricio es un hombre.
    Conclusión: Mauricio es mortal.
  • Premisa 1: Siempre que pedaleo uso las piernas.
    Premisa 2: Pedaleo.
    Conclusión: Uso las piernas.
  • Premisa 1: Todo lo que toca el fuego arde.
    Premisa 2: Arrojo una planta al fuego.
    Conclusión: La planta arde.

Argumento inductivo

El argumento inductivo es un razonamiento que va de lo particular a lo general. La diferencia fundamental entre el argumento deductivo y el inductivo se basa en el recorrido lógico que cada uno plantea:

  • Los argumentos deductivos parten de premisas generales hacia una conclusión particular. Las conclusiones están contenidas en las premisas. Es un recorrido descendente.
  • Los argumentos inductivos parten de premisas particulares para intentar extrapolar una ley o una conclusión general. Las conclusiones se obtienen de una formulación de leyes a partir de una generalización. Es un recorrido ascendente.

Existen otras diferencias entre ambas formas de argumentar cuya formalidad es menor. La inducción, por ejemplo, emplea la observación, el registro y el contraste de información fáctica para construir premisas generales que sirvan de fundamento a lo planteado. En ese razonamiento se observa un salto de fe que nunca puede darse en un razonamiento deductivo: nada puede afirmarse que no sea derivado como consecuencia lógica de lo ya dicho.

Referencias

  • Gamut, L. T. F., & Durán, C. (2002). Introducción a la lógica. Buenos Aires, Argentina: Eudeba.
  • Obiols, G. (1997). Nuevo curso de Lógica y Filosofía. Kapelusz.
  • Díez, J. A. (2002). Iniciación a la Lógica. Ariel.

Sigue con:

¿Te interesan nuestros contenidos?

Sigue nuestra cuenta de Instagram, donde publicamos contenidos exclusivos.

¿Cómo citar este artículo?

Citar la fuente original de donde tomamos información sirve para dar crédito a los autores correspondientes y evitar incurrir en plagio. Además, permite a los lectores acceder a las fuentes originales utilizadas en un texto para verificar o ampliar información en caso de que lo necesiten.

Para citar de manera adecuada, recomendamos hacerlo según las normas APA, que es una forma estandarizada internacionalmente y utilizada por instituciones académicas y de investigación de primer nivel.

Espínola, Juan Pablo (24 de octubre de 2024). Argumento deductivo. Enciclopedia Humanidades. Recuperado el 5 de noviembre de 2024 de https://humanidades.com/argumento-deductivo/.

Sobre el autor

Autor: Juan Pablo Espínola

Licenciado en Filosofía (Universidad de Buenos Aires)

Fecha de actualización: 24 de octubre de 2024
Fecha de publicación: 20 de noviembre de 2023

¿Te fue útil esta información?

No

    ¡Genial! Muchas gracias por visitarnos :)